viernes, 30 de septiembre de 2011

Lectureando: 'Las estrellas cinematográficas', Richard Dyer

“¿Qué película vemos,… la de Tom Cruise o la de Jennifer López?”,… “¿Te gustó la última de Bardem?,… a mi me encantó”…. “No me acuerdo del título… pero Tom Hanks estaba genial”. Estas frases y muchas parecidas se pueden oír en la cola del cine o en conversaciones distendidas sobre cine en cualquier casa o bar de la esquina. Solo se ha ido cambiando el nombre del actor o de la actriz y tenemos la misma fórmula, una combinación que desde hace más de setenta años la industria, sobre todo la norteamericana, ha ido apuntalando. No importa el nombre de la película, el director encargado de llevar a buen puerto el largometraje, y mucho menos tal o cual experto en cada una de las secciones; lo que interesa es la estrella, ver su último blockbuster y seguir fielmente su avatares en la pantalla y fuera de ella.
¿Se puede ver a esa star como un producto industrial?, ¿Somos borregos siguiendo las mentiras de las grandes producciones cinematográficas?. La respuesta inicial sería que no, para nada nos sentimos así; pero esa es la grandeza de la factoría hollywoodiense, que a través de unos factores de mercado que para el público se perciben como invisibles nos dan a los consumidores un material para devorar, sin necesidad de pensar dos veces en los logros de muchas de las estrellas. Las modas, la imagen, los líos extramatrimoniales,… todo, absolutamente todo esta al alcance de nosotros para acercarnos a las nuevas divinidades del Olimpo, las estrellas cinematográficas. El culto al héroe e idolatría de las stars sigue siendo un lugar común en la sociedad contemporánea, y cuando se acercan a posiciones extremas se llega a la condición de “culto”, las iglesias se quedan vacías ya que los nuevos dioses están junto a nosotros en una gran sala a oscuras y a veinticuatro fotogramas por segundo.

sábado, 24 de septiembre de 2011

Arte en un clip: Nirvana 'Smells like teen spirit’

Hoy hace 20 años que se puso a la venta ‘Nevermind’, el segundo disco tras ‘Bleach’ en estudio de Nirvana. Echando la vista atrás el trabajo de Cobain, Novoselic y Grohl se puede considerar de obra maestra, ¡puta obra maestra!, de disco perfecto que sale cada muchos años. La rabia contenida, la negación de una realidad que desespera, la juventud como catalizadora de violencia, los prejuicios de la sociedad,… todo ello es ‘Nevermind’ y mucho, mucho más.

Para mí fue el descubrimiento de que había algo fresco y salvaje dentro del aburrido panorama musical. Nada de poses, nada de música pregrabada, de reunión de chicos con peinados a la moda e intentándose camelar a la chica de instituto. Con Nirvana por fin se vislumbró toda la podredumbre presente en el mundo; esa mierda de “sueño americano” asfixiaba a todo aquél jovenzuelo algo freak que no encajaba dentro de los cánones socioestamentales.

El video ‘Smells like teen spirit’ es un ejemplo de rabia y contundencia. Al principio parece el escenario de alguna competición deportiva, con cheerleaders, gradas y canastas de baloncesto (típica imagen de instituto americano) pero algo huele a podrido en ese ambiente y las imágenes, y personajes, poco a poco se van retorciendo, girando hacia un precipicio de locura y violencia. El lado oscuro de la juventud está presente de cada más en sus pocos más de cuatro minutos y medio; pero es una mirada sincera, agradecida y totalmente necesaria. Ser joven a veces es eso, insatisfacción, frustración y desengaño. Gracias Kurt.


miércoles, 14 de septiembre de 2011

Comiqueando: “Notas a pie de Gaza” de Joe Sacco

Cuando empezamos la realización del blog uno de los temas que no queríamos tocar era la política. Estábamos hartos de tanta palabra vacía, de sucios engaños, de chupatintas y chorizos. Realmente nos hacía una bestial pereza y poco nos divertía inmiscuirnos es ese farragoso tema. Aunque la verdad es que no hablar de política es ya un acto político, de insumisión frente a esos malditos encorbatados que nos están llevando a la ruina tanto económica como social. Lo expuesto con anterioridad es la teoría, pero cuando lees la obra de Joe Sacco (Malta, 1960) no tienes más remedio que sumergirte en el relato y mostrar tu disgusto con las atrocidades que va contando. El autor viaja a los puntos calientes del mundo, Irak, Gaza o Sarajevo, y se sumerge en la vida de la gente común y se dispone a describir su dura realidad bajo la forma de tinta y papel. Al autor se le tilda de partidista; él no engaña a nadie que su lado es el del pueblo palestino pero las cosas que explica son totalmente verídicas por quien la cuenta. Sacco da voz a aquellos silenciados por medio siglo de atrocidades, esta junto a aquel que ha perdido su familia, su sistema de vida, su casa o su integridad. Él no sólo es un espectador si no que vive junto al martirizado, siendo un testigo en primera fila de lo que ocurre. Sacco admite que toma partido y admite además que "Yo no creo en la objetividad como se practica en el periodismo norteamericano. Yo no soy anti-israelí. Es simplemente que creo mucho en lo que se puede conseguir a través del punto de vista palestino”. 

En 'Notas a pie de página' Sacco viaja otra vez a Palestina para centrarse en un incidente concreto, aquel que en 1956 dejó entre 100 o 300 muertos palestinos civiles, según las diferentes fuentes, a tiros por soldados israelíes. Al parecer, un simple detalle o una invisible nota a pie de página de una larga historia de muerte, ese día, en Rafah, revela las verdades que han llegado a definir una guerra interminable. La vista hacia atrás del autor nos da una lección de cómo no se puede olvidar el pasado para poder seguir adelante en el futuro, algo que parece que el gobierno israelí parece haber olvidado. Sacco se sumerge en la vida cotidiana de Rafah y la vecina ciudad de Khan Yunis, buscando descubrir la verdad de Gaza en los años cincuenta del siglo pasado y también en el mismo presente. El autor da voz a multitud de supervivientes del ataque israelí y teje un documento poliédrico de la vida en la zona de la Franja de Gaza, con sus luces y demasiadas sombras, con las excusas integristas y la violencia sin sentido de los inmensamente armados soldados israelíes. Sacco está tan interesado en el proceso de obtención de la historia como en la propia historia, un hecho que sólo sirve para recordarle lo mucho que ha de trabajar en el filtrado y pulido de las noticias relatadas. 

Hablar de su estilo, es ante todo comentar su sencillo y preciso dibujo en blanco y negro, y su abundante documentación gráfica conocida gracias a sus propias vivencias de sus viajes en la zona. Nada en la obra esta puesta al azar y cada página esconde viñetas magistralmente resueltas; crea viñetas despejadas, con un trazo limpio y seguro, y páginas de muy variada hechura que contribuyen al relato, no lo lastran. Sacco es un tipo que sabe del todo dibujar, que compone las páginas con gusto y tiene un gran sentido narrativo. 'Notas...' no es un “matarratos”, es una obra vigorosa, evocadora y del todo excelente. Tan necesaria es su lectura que el interés histórico y artístico se mezclan para hacer uno de los cómics más interesantes editados en los últimos años.

martes, 13 de septiembre de 2011

Escribir con la luz (I)


Una pequeña presentación: el fotógrafo fotografiado y la fotógrafa autorretratada. 
Esta es la primera, y vendrán muchas más. Si quieres ver otras acércate aquí.




sábado, 10 de septiembre de 2011

Va de trailers: 'Un método peligroso' y 'The Ides of March'

Una legión de grandes actores dan vida a las dos siguientes películas: 'Un método peligroso' con Viggo Mortensen y Michael Fassbender; y 'The Ides of March' con Ryan Gosling, George Clooney, Philip Seymour Hoffman y Paul Giamatti.

Ambas han recibido en la Mostra de Venecia de este año grandes elogios pero aún tardarán un poco en llegar a nuestras pantallas. De momento degustemos sus trailers:



miércoles, 7 de septiembre de 2011

Lectureando: 'Max' de Howard Fast

“Señor Ofertas”, así es como me llama la graciosa de mi pareja. Donde voy si me encuentro con un cartel que proponga un buen ahorro sobre alguno de mis numerosos hobbies... pues allí estoy sacándome la cartera del bolsillo y buscando algo apetecible que llevarme a casa. Es verdad, tengo un problema, soy “ofertadicto”. Pero es que encontrar un tesoro a mitad de precio, o mucho menos, se disfruta el doble. Numerosas obras que tienen un sitio privilegiado en mi corazón provienen de esas maravillosas letras, de la grandiosa palabra OFERTA. Todo lo anterior viene bastante bien para la novela que les muestro a continuación ya que andaba en una feria, llena de libros más viejunos que la Duquesa de Alba, cuando descubrí en una pirámide de celulosa y polvo el libro 'Max'. El autor era Howard Fast (1914-2003), el escritor de la novela 'Espartaco', que mi adorado director de cine Stanley Kubrick inmortalizó allá por 1960 con Kirk Douglas como héroe protagonista. El tema era del todo atrayente, la historia que se cuenta es la creación de la industria del cine, unas empresas que cambiaron el mundo pero pocas veces ha sido contada en la ficción. Es una de las grandes historias del siglo XX, la importancia de la industria es descomunal, siendo capaz de cambiar por sí misma a todo aquel que accede a su mundo de veinticuatro fotogramas por segundo. Un buen escritor, un gran tema... y por sólo un euro. Pues eso, a la saca.

'Max' trata de la vida de Max Britsky, un niño judío nacido en el gueto neoyorkino de East Side, y su lucha por sobrevivir comenzando desde la más horrenda de las indigencias. Tras la muerte de su padre se ha de hacer cargo de su familia, será con apenas doce años el cabeza de familia y comenzará en el negocio de los Nickelodeons y poco a poco convirtiéndose en un afamado empresario durante su dentro de la novedosa industria del cine; cuando apenas no había el concepto se arte, de estudios de rodaje, de sala cinematográfica.

Con el tiempo se convierte en uno de los propietarios de los grandes estudios del poderoso negocio. Años después tendrá que dejar su hogar para marcharse a la calurosa California, en busca de buen clima para rodar mejor sus cintas y sobre todo para estar lejos de las poderosas manos de Edison y su trust. Así se convertirá en uno de los más ricos de Estados Unidos y de todo el globo terráqueo. El libro trata sobre la historia del cine, pero también de la “rise and fall” de un eterno chiquillo que a pesar de ser un astuto hombre de negocios deja mucho que desear en sus habilidades sociales con la gente que le rodea. Es también una narración humanística, donde se observan muchas de las cosas que nos rodean: el amor, la imaginación, el odio, la lealtad, la traición, la soledad, la familia (como sangre de nuestra sangre o como un lastre que acompaña a las personas durante toda su vida).

La novela tendría que ser lectura obligatoria para todo estudiante de Historia del Arte o de Comunicación Audiovisual y de todo aquel que quiera sumergirse en el maravilloso mundo del celuloide. Además esta escrita de forma grácil, siendo la totalidad de sus páginas un puro entretenimiento y del todo atrayente. Se ve la buena mano de Fast para perfilar tanto a personajes, enorme es su estudio del protagonista y de su esposa, como también las situaciones dramáticas que desfilan por la narración. Un libro totalmente disfrutado y seguro que en poco tiempo estará otra vez en mi mesita para otra concienzuda lectura.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Arte en un clip: Bon Iver ‘Holocene’

El Holoceno (del griego holos, todo, y kainos, reciente), es por tanto la era totalmente reciente, la última y actual época geológica del período Cuaternario. Comprende los últimos 11.800 años aproximadamente, desde el fin de la última glaciación. Por tanto es nuestro tiempo, pero también el de muchas generaciones que nos antecedieron; no estamos solos ya que el ahora se entremezcla con  buena parte de la historia de la humanidad. No somos más que un rastro de polvo perecedero en la historia de la tierra. Hay que aprovechar los pocos momentos que estamos en vida para apreciar lo que nos rodea, y eso es lo que nos muestra Bon Iver.

Grabado en parajes aislados y extremos de una isla mágica como es Islandia; el paseo infantil por esos paisajes alucinantes encaja muy bien con la música emotiva y descarnada del autor. En una soledad brutal y salvaje nos encontramos como niños en busca de nuestro camino, pero siempre maravillándonos de lo que tenemos ante nuestros ojos, la naturaleza imperecedera.
‘Holocene’ es el segundo single de su gran ‘Bon Iver’ y no desmerece en absoluto lo ya mostrado en su anterior trabajo For Emma, Forever Ago’. La calma tensa de la voz del intérprete no hace más que engrandecer el arte de alguien llamado a hacer cosas muy grandes dentro del panorama musical actual.